De la clásica al avant-garde:Amanda Mur presenta “Neu Om”en Barcelona y Madrid esta semana.

0
La cantautora, pianista y productora 
Amanda Mur se aterriza esta semana
en Barcelona y Madrid para presentar “Neu Om”,
un álbum de debut que navega entre la
vanguardia, la experimentación y el folclore.

Las citas con la cántabra son
hoy mismo 11 de junio en Casa Montjuïc, Barcelona 
y mañana jueves 12 de junio en Sala Villanos, Madrid.

No ocurre tantas veces escuchar el debut de una artista y que suene tan rotundo, tan definitivo. Ocurre en ‘Neu Om’, primer disco oficial de Amanda Mur. Lo que tenemos entre manos no son los pasos tentativos de alguien buscando su camino, sino la obra casi definitiva de una artista que tritura a la primera y sin contemplaciones expectativas, tendencias y usos y costumbres de la industria musical.Como si fuera un sortilegio sonoro que se ejecuta en el oído del oyente, ‘Neu Om’ enlaza vanguardia y tradición, texturas orgánicas y sintéticas, emoción e intelectualidad. Un viaje que arranca en Cantabria, tierra natal de Amanda Mur, y que llega hasta el mismísimo centro del corazón de aquel que ose darle el play. Una obra concebida como un todo, de las que deben escucharse de principio a fin. Como si fuera una rendija por la que ver el alma de su creadora.Amanda Mur (Cantabria, 1996) no es una recién llegada, eso queda claro. De formación clásica en piano y voz —se nota, para bien—, ha compuesto obras para concierto que se han interpretado en lugares de la magnitud del Auditorio Nacional o el Teatro de la Zarzuela. Ese bagaje dialoga aquí con otras influencias sonoras y personales para ofrecer un artefacto único en la escena nacional. Nadie es como Amanda Mur, nadie suena como Amanda Mur.‘Neu Om’, tiene como inicio cronológico la pandemia, aunque se trata de una gestación de largo recorrido, con diversas fases creativas desde entonces hasta ahora, ya con el producto final en nuestras manos. A la producción, la propia Amanda Mur, rodeada de un equipo de lujo formado por Adrián Foulkes, en tareas de mezcla y asistente de producción, y del músico británico de grime Joker, que se ha encargado de mezclas adicionales y también del mastering.En propias palabras de la autora (¿Quién mejor para explicarlo?), se trata de “una hibridación de estilos y géneros que existe gracias a un origen común: una música neo-mística que busca ritualizar el proceso de escucha generando un espacio de intimidad compartida con el público”. Dicho y hecho. Un juego de contrastes creativos y emocionales que trasciende géneros y sacralizan la poesía con inflexiones que recuerdan al rezo. Del misticismo del bosque cántabro al mundo.
Entradas 11 de junio: Casa Montjuïc, Barcelona
Entradas 12 de junio: Sala Villanos, Madrid
El apabullante recorrido por ‘Neu Om’ arranca con Maithuna, concepto escrito en sánscrito (literalmente: “unión sexual en contexto de ritual”) que conecta el tantra con Hildegard von Bingen y que interpreta el orgasmo como una liberación física y mental. Perfecta introducción a los parámetros que rigen el conjunto. Le sigue Pandemic, que recuerda el origen emocional del trabajo, con influencias de la electrocumbia e incluyendo ritmos y timbres tribales que invitan a un baile salvaje. Amanda explica el proceso de la canción: “La llamada inicial que enuncia una posible sensación de apatía o desagrado (“En la humedad no siento el agua”) es el comienzo de un ritual de liberación”. El camino está claro y no es negociable.‘Canto a los migrantes’ quizá sea la canción más explícita de ‘Neu Om’, una reflexión sobre la incomunicación y el dolor de los que se pierden en el camino de la migración. Canto gregoriano, zanfona, rock, folclore nórdico, música urbana y minimal tech con estructura de clásica contemporánea. Tras ella, el primero de los dos interludios instrumentales de la colección y, después, ‘Mutante’, pieza que supone un leit motiv vital y filosófico. Sobre esta canción, la autora confiesa no imaginarse una vida sin “el despertar constante de la frescura y la novedad”. La importancia de lo pequeño frente a la búsqueda de los grandes cambios. La belleza de los detalles, que aquí se superponen para crear un todo embriagador, apabullante, de sensibilidad subyugante y poder sugestivo.Después del bellísimo segundo interludio, paso para ‘Vapah’, plegaria sobre el cuerpo y el embarazo, no deseado, que se deconstruye en electrónica y recuerdos a Joaquín Rodrigo y el fado. Unión imposible y perfecta que continúa asentando la personalidad del álbum. ‘Péndulo que baila’ es un viaje en el tiempo desde la música medieval al ambient, un juego de espejos y contrastes que suena radicalmente contemporáneo y atemporal. La vanguardia es eterna en Amanda Mur, que cierra su alucinante universo con la composición titular. No es un disco, es una obra de arte. El inicio de un camino que se advierte único.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.